Nació este poeta en Morasverdes (Salamanca) en 1935. Poseo, de sus obras, Domingo, Habitante del vértigo, La hora de las tentaciones e Irremediablemente humano. Este último libro lo publicó Ediciones 23/27, de la que formaba parte y que desapareció como tantas cosas que nacen muertas. Vive en Guatemala.
"Sino con la presencia y la figura",
y Tú sin asomar y yo esperando.
Ando mi soledad y la desando
del sueño hasta la misma cerradura.
¿Dónde estarás, Amor? ¿Quién me asegura
que no pasaste ya, que estás pasando,
que estás rondando, Amor, y vigilando
mi puerta y mi temblor de quemadura?
Poco debes quererme, si me quieres.
Poco debe importante mi desvelo.
Poco debes dañarte, si me hieres.
Parece que me estás tomando el pelo
igual que a un niño, Amor, cuando me dejas
alas tan largas y tan corto el vuelo.
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Hecha de esperar tengo la esperanza
y de dudas y sustos la certeza.
A distinguir se para la cabeza...:
en bruma y broma el corazón avanza.
Os cito al fiel infiel de la balanza:
poned aquí tesón, aquí vileza.
Asno, rocín, alforja, espuela... Reza
detrás de Don Quijote Sancho Panza.
Campo-alma-ilusión sin fin: molinos,
rastrojos, nubes, cuervos, rejas, hoces,
espejos, espejismos, cal, caminos...
Sol y sed, polvo y sed, augurios, voces,
osamentas, candiles, brujas, lirios,
relinchos, atabales, besos, ¡coces!
(De Habitante del vértigo, 1971)
Estimado J. L. M. Muchas gracias por publicar mis poemas, pero ha confundido usted mi foto con la de mi gran amigo y gran escritor Paco Pérez de Antón.-Además, el verso "Hecha de esperar tengo la esperanza" es: "Hecha de esperas tengo la esperanza". Considéreme su amigo y discúlpeme. Amable (amables@ufm.edu).
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